Que las violaciones a los derechos humanos en el régimen iraní son moneda corriente, ya no es ninguna novedad en los países de Occidente. Y eso quedó más que ratificado en los últimos días al conocerse que el abogado de la mujer iraní que fuera condenada a la lapidación, Mohammed Mostafai, se encuentra en Noruega asilado, luego de que se hiciera pública la existencia de una orden de arresto cursada por un fiscal de Teherán.
