Israel podría salvar al mundo de la hambruna con carne que no es carne

28/Abr/2023

UnidosxIsrael

UnidosxIsrael

La startup israelí Steakholder Foods asegura tener la tecnología para poder imprimir “toneladas por día” de carne cultivada, algo que podría ayudar a combatir en un futuro el hambre a nivel mundial. Steakholder Foods es una compañía de alimentos que está a la vanguardia en el desarrollo de una solución para producir una variedad de productos de carne de res y pescado, tanto como materia prima como en cortes enteros, como una alternativa a la agricultura y la pesca industrializadas.

Tiene su sede en Rehovot, Israel, y está comprometida con el desarrollo de soluciones sostenibles para los desafíos de la producción de alimentos.

Si bien hay varias empresas que apuestan por alternativas a la carne, Steakholder Foods ofrece una tecnología que impulsará todo el mercado mundial de este ramo.

Arik Kaufman, CEO de Steakholder Foods, con sede en Israel, ha dicho: “estamos recreando Star Trek y eso es asombroso”, según la publicación Entrepeneur.

La comparación es del replicador mágico en la popular serie de televisión de ciencia ficción que podría crear comidas a pedido.

“Lo que estamos haciendo aquí es una hazaña científica”, señala.

La startup está ampliando un proceso para ayudar a las empresas a imprimir productos cárnicos. También conocida como carne cultivada, está hecha de células animales en lugar de animales sacrificados. Steakholder Foods también colabora actualmente para imprimir productos pesqueros, comenzando con anguila y mero.

Según el sitio web de Steakholder Foods, la carne impresa en 3D que la tecnología patentada de la compañía ayuda a imprimir está “compuesta de músculo y tejido graso cultivado a partir de células animales y desarrollada para ser indistinguible de la carne criada en granjas en sabor, textura y olor”.

Steakholder Foods tiene la intención de liderar la industria en términos de soporte tecnológico mientras brinda servicios al sector de la carne cultivada.

Al comentar sobre la tecnología 3D de la compañía, Kaufman afirma que es “la primera bioimpresora de alto rendimiento que puede imprimir a un ritmo muy alto, con extrema precisión y manteniendo la célula viable durante todo el proceso”.

“Comenzamos creando tinta biológica a partir de las líneas celulares que hemos seleccionado cuidadosamente para esta tarea. Luego cargamos la tinta biológica en la impresora 3D, enviamos un comando para comenzar a imprimir y listo: se imprime un corte completo de carne”, dice.

Steakholder Foods recibió recientemente una subvención de 1 millón de dólares de la Fundación de Investigación y Desarrollo Industrial de Singapur Israel (SIIRD) como parte de su colaboración con Umami Meats, con sede en Singapur.

La colaboración permitirá a Steakholder Foods implementar su tecnología de bioimpresión 3D de vanguardia, desarrollada por un equipo de ingenieros mecánicos y biólogos celulares internos de la empresa.

La forma en que se crea la carne es que, al principio, se producen dos tipos especiales de tinta biológica utilizando células animales cultivadas en laboratorio: una para el músculo y otra para la grasa.

Después de eso, el producto se imprime capa por capa, en el que las dos tintas biológicas se aplican en una variedad de secuencias diferentes. Al tener un control preciso sobre la aplicación de ambas tintas, se puede optimizar la jugosidad y el veteado del corte.

Además de eso, la tecnología permite la impresión 3D del producto en cualquier forma, ancho y proporción de marmoleado. El resultado es una delicada pieza de carne sabrosa que se puede preparar para una comida deliciosa.

La impresora Steakholder Foods ganó el interés de toda la industria en la segunda mitad de 2022 cuando la empresa se embarcó en una gira mundial con un prototipo, imprimiendo bisteces bajo demanda en conferencias y eventos en tres continentes.

Según Kaufman, “estamos aprovechando este interés para acelerar las colaboraciones comerciales y las asociaciones estratégicas con el fin de comercializar nuestras capacidades de bioimpresión 3D”.

Idealmente, el producto tendrá que pasar la estricta prueba que le administrará FDA de EE. UU. Sin embargo, el equipo de Steakholder no se desanima y está seguro de la calidad y capacidad de su tecnología para empoderar a los jugadores en la industria de la carne cultivada para imprimir carne al más alto nivel de higiene.

“La carne cultivada también se conoce como ‘carne limpia’ por una buena razón. Se produce en un ambiente limpio, sin hormonas ni patógenos y proporciona una solución mucho más segura para ‘del laboratorio a la mesa’ a diferencia de las opciones ‘de la granja a la mesa’ que saber hoy”, dice Kaufman.

“Para la carne cultivada, nuestra tecnología garantiza que el proceso pueda ser completamente monitoreado y transparente desde el productor hasta el consumidor final”, agrega.