Hollande reconoce la responsabilidad francesa en los crímenes nazis

23/Jul/2012

El País, España

Hollande reconoce la responsabilidad francesa en los crímenes nazis

Un crimen cometido “en Francia por Francia”. Con estas palabras, el presidente francés, François Hollande, ha reconocido esta mañana la responsabilidad de su país en la deportación de judíos durante la Segunda Guerra Mundial. El mandatario ha presidido el homenaje a los 13.152 judíos (entre ellos 4.000 niños) deportados hacia los campos de exterminio de la Alemania nazi tras la redada del Vel d’Hiv, el Velódromo de Invierno, ejecutada en 1942 por la policía francesa bajo las órdenes del régimen colaboracionista de Vichy.En el acto en conmemoración del 70 aniversario de la operación, Hollande subrayó que para la operación no fue necesario movilizar “ni a un solo soldado alemán”. Con el gesto, el mandatario se desmarca de su mentor, el socialista François Mitterrand (presidente francés entre 1981 y 1995), que se negó a reconocer la responsabilidad de Francia en los actos criminales cometidos durante la ocupación nazi en la II Guerra Mundial. El socialista aplaudió el gesto del expresidente conservador Jacques Chirac, que reconoció públicamente la responsabilidad.“Estamos aquí reunidos para evocar las horas oscuras de la colaboración, de nuestra historia, y por lo tanto la responsabilidad de Francia”, ha dicho Hollande. “Les debemos la verdad a los mártires judíos del Velódromo de Invierno”, ha insistido. “Pero la verdad es también que aquel crimen se cometió en contra de Francia y en contra de sus valores”.El 16 y 17 de julio de 1942 fueron detenidas más de 13.000 personas, entre ellas 5.919 mujeres y 4.115 niños, de acuerdo con los archivos policiales. Las parejas sin hijos y los solteros fueron trasladados directamente al campo de Drancy, al norte de París, paso previo al campo de exterminación de Auschwitz y donde este otoño se inaugurará un museo conmemorativo. Las familias con niños fueron hacinadas durante días en el Velódromo de Invierno, cerca de la Torre Eiffel, derruido en 1959 y donde ahora se encuentra una placa homenaje, antes de ser dirigidos a otros campos franceses y deportados.“Este crimen abrió la vía a más redadas” llevadas a cabo en “ambos lados de la demarcación” —la Francia ocupada por los nazis y la de Vichy— contra los judíos, y también contra los gitanos, según ha recordado Hollande. En total, unos 76.000 judíos de Francia fueron deportados durante la guerra hacia los campos de concentración alemanes. Solamente 2.500 sobrevivieron.Hollande sigue así el camino abierto en 1995 por el expresidente Jacques Chirac, cuyas palabras citó también el actual jefe de Estado. “La locura criminal del ocupante fue secundada por franceses, por el Estado francés (…) Francia, patria de las luces y de los derechos humanos, tierra de acogida y de asilo, cometía lo irreparable”, declaró entonces Chirac, convirtiéndose en el primer presidente en reconocer la responsabilidad francesa.El predecesor de Chirac, el socialista François Mitterrand y modelo político de Hollande, mantuvo durante su mandato la línea marcada por el general Charles De Gaulle, que decía que el único régimen legítimo de Francia durante la II Guerra Mundial era la Francia Libre liderada desde Londres por el propio De Gaulle, y no el régimen de Vichy del mariscal Philippe Pétain, al que el Parlamento francés otorgó plenos poderes en 1940 y quien firmó al armisticio con Alemania ese mismo año.Hollande ha insistido en el deber de “transmitir a las nuevas generaciones” el conocimiento sobre lo ocurrido en Francia durante la contienda. Un estudio difundido esta semana revela que el 42% de los franceses nunca ha oído hablar de la redada del Velódromo de Invierno. El porcentaje aumenta entre los más jóvenes: hasta el 57% para los encuestados que tienen entre 25 y 34 años, el 60% para los que tienen entre 18 y 24 años y el 67% para los de entre 15 y 17 años.Recordando la matanza en una escuela judía en Toulouse del pasado mes de marzo, en la que murieron tres niños y un rabino “por el hecho de ser judíos”, Hollande ha reiterado la voluntad de Francia de perseguir “con la mayor determinación” el antisemitismo. “No es una opinión, sino una abyección”.