Hablamos con la resistencia anti-Hamás en Gaza: “Los gazatíes maldecimos el 7-O, sólo ha traído miseria y dolor”

26/Jun/2024

Libertad Digital- por C. Jordá

Libertad Digital- por C. Jordá

Pocas cosas más complicadas que dar voz a los discrepantes en países como Siria, Irak, Líbano y, por supuesto, la Gaza oprimida por Hamás y esa es, precisamente, la labor que lleva a cabo la ONG Center for Peace Comunications, que lleva años tejiendo redes de personas que tienen la valentía de oponerse a regímenes criminales, aunque eso pueda costarles la vida. Crédito foto: Europa Press

Gracias a esta organización podemos conectar desde la redacción de Libertad Digital con alguien que vive en la Franja y está sufriendo la guerra y, desde mucho antes, la dictadura de Hamás.

Por supuesto, no podemos revelar ningún dato de nuestro interlocutor, del que sólo vemos un nombre en el teléfono móvil desde el que surgen su voz y el sonido de varios niños que juegan y gritan lo suficientemente cerca de él para que lo escuchemos.

La entrevista transcurre en un formato un tanto complicado: preguntamos en inglés, las cuestiones son traducidas al árabe y, cuando el entrevistado responde en este idioma uno de los colaboradores del Center for Peace Comunications vuele a ejercer de traductor para que podamos tener esas respuestas en inglés. Aun así, la conversación es razonablemente fluida y, sobre todo, muy interesante.

Pregunta: ¿Cuál es la situación en Gaza en estos momentos?

Respuesta: En este momento las operaciones militares israelíes se desarrollan en aproximadamente el 70% de Gaza, la mayoría de los civiles al este de Jan Yunis, en una situación casi inhumana. La ayuda que está llegando desde países europeos o árabes está siendo robada por Hamás. No queda ninguna infraestructura y Hamás nos está usando como escudos humanos en estas áreas.

P.: ¿Hay hambre?

R.: No es una hambruna, pero no nos llega la ayuda, Hamás la roba y en ocasiones la vende a precios muy muy altos. Se puede encontrar harina para hacer pan, pero otros tipos de comida es imposible. La ayuda humanitaria está siendo robada por Hamás.

P.: ¿Cómo os está usando Hamás como escudos humanos?

R.: Pueden llegar de cualquier parte, de debajo de nosotros por los túneles, a veces los ves entre las tiendas de campaña, donde se esconden y, claro, no puedes decirles que no. Uno de los últimos que fue asesinado – nuestro interlocutor usa la palabra “asesinado”, aunque no sería coherente con un acto de guerra– en un bombardeo estaba disparando a Israel desde una escuela. Cuando desde Rafah nos movimos a un área de Jan Yunis siguiendo las instrucciones del ejército de Israel, vimos sorprendidos que todos los combatientes de Hamás venían también. Ahora podemos ver cómo están entre nosotros y, por ejemplo, se están escondiendo en escuelas que se supone que son para los desplazados. Para resolver este problema estamos tratando de trabajar en una zona segura en la que cada persona que entre conozcamos su identidad. Mucha gente se ha sido asesinada en los interrogatorios y las torturas de Hamás. Personalmente he sufrido muchos abusos del régimen de Hamás. He sido interrogado en muchas ocasiones, a veces me secuestraban para ello, otras lo hacían en la comisaría, donde era psicológica y físicamente torturado. Pero por supuesto no soy sólo yo: todos aquellos que no están de acuerdo con Hamás son sometidos a detenciones y atacados en muchos niveles, por ejemplo no les dejan trabajar. Mucha gente ha sido asesinada en los interrogatorios y las torturas de Hamás, yo directamente conozco a una persona – nos dice el nombre pero lo omitimos para no comprometer la seguridad de nadie – que fue asesinada por Hamás en la cárcel.

P.: Sin embargo, a pesar de todo lo que nos cuenta, hay encuestas que llegan a España y reflejan que Hamás todavía tiene un apoyo fuerte entre la población de Gaza. ¿Es esto cierto?

R.: Estas encuestas las hace un grupo que está en Doha, en Qatar, que es propiedad de un antiguo miembro de la Knesset Azmi Bishara, un árabe israelí que desde Qatar controla muchos de estos canales como Al Jazeera que tratan de manipular la verdad y la realidad en el mundo árabe y quieren mostrar que el mundo árabe apoya a Hamás.

P.: ¿Qué pensó y sintió cuando vio lo que estaba pasado el 7 de octubre?

R.: Lo que vimos fue una tragedia, no hay ser humano que no pueda sentirse conmovido por todas las atrocidades que cometió Hamás en Israel. Soy musulmán, pero antes de musulmán soy humano y cualquier humano que ve a un niño siendo asesinado, o una madre o a una mujer mayor o incluso cualquier civil siendo atacado de una forma tan brutal se ve afectado y está en contra de eso. No hay ser humano que no pueda sentirse conmovido por las atrocidades que cometió Hamás en Israel. Además, las consecuencias del 7 de octubre han hecho que desde ese día cada habitante de Gaza haya maldecido el 7 de octubre y los que cometieron las atrocidades del 7 de octubre, que sólo nos traído miseria. Quiero añadir que las víctimas israelíes son iguales que las palestinas: civiles palestinos, mujeres y niños, han muerto por esta guerra y necesitamos condenar también estas muertes.

P.: ¿Tiene relaciones con los soldados de Israel, algún punto en el que se encuentren con ellos en el reparto de ayuda o lo que sea?

R.: No, no soy partidario de colaborar con los militares de Israel, yo nunca he conocido a un israelí en toda mi vida, creo en la convivencia y la paz como principio y que sería bueno para la causa palestina. En este momento pienso que la prioridad es trabajar al nivel civil, no militar, trabajar en un nivel político en el que podamos resolver nuestros problemas y después ya podremos hablar de seguridad y cooperación e incluso cooperación militar. En este momento lo que hay que hacer es establecer una relación política con el Estado de Israel.

P.: ¿Qué cree que puede ocurrir en Gaza cuando acabe la guerra?

R.: Con un poco de suerte Hamás desaparecerá a nivel militar y político y yo espero que en Gaza el liderazgo lo tomen jóvenes gazatíes. La idea de establecer esa zona segura en Gaza debe presentarse en los medios occidentales en todos los idiomas. Sería un área aparte de los dos contendientes en el conflicto: Hamás e Israel, no habría israelíes en el interior y tampoco miembros de Hamás. Sería una zona a la que se pudiese llevar ayuda internacional y en la que nosotros podríamos gestionarla incluso seríamos capaces de hacerlo al nivel de seguridad desde dentro.