Un horror vigente

12/Sep/2011

El País, Embajador Carlos Orlando

Un horror vigente

11-9-2011
CÓNSUL URUGUAYO EN NUEVA YORK EMBAJADOR CARLOS ORLANDO
Hoy se cumplen los diez años del ataque terrorista mayor que sufriera Nueva York. Un día terrible y atroz para el mundo y para los Estados Unidos. El mundo estaba cambiando y no para bien. Sabía de la resistencia de los neoyorquinos, tradicional y famosa; su terquedad y ambición, su orgullo y deseo de progreso y prosperidad en una ciudad difícil donde todo cuesta el doble de esfuerzo y la recompensa es vivir en un lugar especial: el centro del mundo o uno de los centros del mundo actual.
Mis conversaciones actuales con ciudadanos comunes o encumbrados, reflejan la misma reacción o parecida respuesta: tuvimos que sufrir en silencio para ser nuevamente nosotros, para recuperar esta ciudad. Algunos agregan que tuvieron que olvidar o sepultar dentro de sus conciencias el horror vivido, alejarse del pasado y apretar los dientes para enfrenar el terror de los días posteriores. Hubo que fingir para poder seguir viviendo y reconstruyendo una ciudad no sólo fragmentada en su parte más antigua sino en su estructura espiritual.
Mucha gente ya no habla más de este luctuoso episodio. No contesta cuando se toca el tema y mira el suelo o al vacío; lee, sin embargo, las novedades o el ritual del recuerdo que se celebrará en el Ground Zero Memorial al cumplirse diez años. Mira en los cafés o en los subtes los diarios que resaltan los detalles del mausoleo recordatorio, la forma de cómo están colocados los nombres de los que se sabe que fallecieron. Una ceremonia con sobriedad y respeto.
Hoy a diez años de la tragedia, Nueva York está más activa que nunca, rebosa de turistas y por más problemas económicos que pueda haber, sigue siendo una capital mundial en la que da gusto vivir y compartir. El mundo junto a Nueva York rinde tributo a los que fallecieron inocentemente. A ellos nuestro humilde respeto y a sus familias nuestra solidaridad en el dolor.