2-7-2011 Al menos diecinueve personas, entre ellas menores, murieron por la represión llevada a cabo por las fuerzas del presidente sirio, Bashar al Asad, en la aldea siria de Al Rami, en la zona de Yabal al Zauya, fronteriza con Turquía, según grupos opositores.
El director de la Organización Nacional para los Derechos Humanos, Ammar Qurabi, dijo desde El Cairo que la represión es ejercida por las fuerzas de seguridad, el Ejército y por “matones” del régimen.
Por su parte, los llamados Comités Locales de Coordinación en Siria informaron en Facebook de que, además, hay cincuenta heridos por “disparos de armas pesadas y ametralladoras” y otro medio centenar de personas detenidas.
El mismo grupo agregó que Al Rami está cercada por las fuerzas de seguridad y el Ejército, que han incendiado algunas viviendas y bombardeado otras con artillería.
Además, subrayó que la mayoría de sus habitantes han huido y que solo quedan mujeres, ancianos y los heridos que no han podido ser evacuados porque los leales al régimen disparan contra cualquier cosa que se mueve por la calle.
Anteriormente, la organización “La revolución siria contra Bashar al Asad” había revelado que en la provincia septentrional de Idleb, donde se encuentra Yabal al Zauya, carros blindados del Ejército habían entrado en la localidad de Al Bara.
Esa misma organización y la red opositora Sham indicaron que se pudieron ver tanques que se dirigían de Al Bara a Kafr Nabal y que se han registrado intensos tiroteos en sitios arqueológicos de la zona, mientras que han avistado varios helicópteros sobrevolando el área.
Estas informaciones no pudieron ser verificadas de forma independiente por las restricciones que el régimen de Damasco ha impuesto a los periodistas para trabajar.
Siria es desde el pasado mes de marzo escenario de revueltas populares que se han cobrado las vidas de más de mil civiles, según grupos de la oposición. EFE
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