Presidente de OSU, Samy Mylsztejn: “Jerusalem es el corazón del pueblo judío”

24/Nov/2016

Presidente de OSU, Samy Mylsztejn: “Jerusalem es el corazón del pueblo judío”

Sr. Presidente de la República Dr. Tabaré Vázquez
Sra. Embajadora del Estado de Israel Nina Ben Ami
Canciller de la República Sr. Rodolfo Nin Novoa nominado al Premio Jerusalem 2016
Sres. Premio Jerusalem
Sres. Ministros
Senadores de la República
Miembros de la Cámara de Representantes
Intendentes de los distintos departamentos.
Presidente del Comité Central Israelita Cr. Israel Buszkaniec
Secretario del Congreso Judío Mundial Cr. Saúl Gilvich
Representante para América Latina de la Organización Sionista Mundial Itamar Steremberg
Presidentes y dirigentes comunitarios
Presidente de Honor de la OSU Bernardo Olesker
Compañeros del Ejecutivo
Amigos todos
Esta noche Jerusalem nos reúne una vez más en torno a ella. Fue allí donde hace más de 4.000 años el profeta Abraham celebró el pacto con Dios dando así origen al monoteísmo.
Hace más de 3000 años el Rey David la erigió en la capital del Reino Judío, y fue el lugar donde se construyó el primer templo que albergaba el Arca de la Alianza de Moisés en el Sinaí, primer código ético y moral de la humanidad y al cual el pueblo judío se mantiene fiel hasta nuestros días.
Ni un solo día durante más de 2.000 años de diáspora el pueblo judío olvidó su capital. Desde todas las latitudes de la Tierra los judíos oraron y oran hacia ella y por ella. A lo largo de la historia y numerosas conquistas ningún imperio la hizo su capital. En la tradición judía no hay celebración en la que no se haga alusión a su nombre. Durante siglos los judíos mantuvieron vivo el anhelo de volver a ella. Cada conmemoración y cada brindis culmina con la frase “Le shna ava ve Ierushalaim”, el año próximo en Jerusalem.
Ciudad sagrada para judíos, cristianos y musulmanes, fue el lugar donde Jesús predicó y vivió sus últimos días en la Tierra, testimonio de ello son los lugares santos para el cristianismo a los que miles de peregrinos acuden año a año. También para el Islam guarda una especial santidad dado que para ellos es desde donde el profeta Mahoma ascendió al cielo.
Para nosotros los judíos es lo espiritual y lo atemporal, pero por sobre todo es el corazón de nuestro pueblo.
Hoy es la capital del moderno Estado de Israel, donde la libertad de cultos y el acceso a los sitios sagrados de los diferentes credos es una realidad y está garantizado.
Allí se encuentra la Kneset (parlamento) de la única democracia del Medio Oriente con representación de todos los sectores de la sociedad.
Desde la capital del Estado, la Suprema Corte de Justicia es quien vela por los derechos de todos sus ciudadanos, los Derechos Humanos, los de la mujer, la salud, la educación, el bienestar y la igualdad, sin importar credo o etnia.
Desde la Universidad Hebrea de Jerusalem, fundada en el año 1918 con su heterogénea población estudiantil, sus logros mayormente en el campo de la medicina y la tecnología son reconocidos y son un gran aporte al desarrollo de la humanidad.
Amigos todos que nos acompañan en una noche tan especial y significativa para nosotros como es la vigesimoséptima entrega ininterrumpida del Premio Jerusalem.
Premio que fue instaurado por el entonces Intendente Teddy Koleck y el Presidente de la Organización Sionista Mundial Simja Dinitz con motivo de expresar el reconocimiento del pueblo judío a todos aquellos que bregan por el respeto y la convivencia pacífica entre los pueblos y sus diferentes creencias y culturas.
A quienes con su acción y prédica hacen defensa plena de los derechos humanos y nos dan muestra de su solidaridad con el pueblo judío y fomentan activamente las relaciones de amistad entre los dos estados fieles a la tradición de nuestro país, al que le cupo un rol importante en las Naciones Unidas a través de su embajador Enrique Rodríguez Fabregat para el reconocimiento del establecimiento del Estado de Israel.
En esta noche Sr. Canciller Rodolfo Nin Novoa lo homenajeamos otorgándole el Premio Jerusalem 2016 porque lo consideramos un gran amigo y aliado, por su inquebrantable firmeza en la defensa de los principios de la democracia, la libertad y el derecho de autodeterminación de los pueblos.
En estos tiempos de grandes desafíos, donde en la globalización parecieran primar los intereses económicos sobre los principios morales, no cesan los intentos por reescribir la historia, ultrajando el pasado y queriendo negar el legado del mismo a las generaciones venideras.
Debemos saber todos que hace menos de un mes en el ámbito de la Unesco (encargado de velar por el patrimonio cultural de la humanidad), a instancias de la Autoridad Nacional Palestina y otros países árabes), propusieron una resolución, donde intentan negar la entrañable relación entre el pueblo judío y Jerusalem. En tal resolución, en 58 representantes de países, 6 defendieron el patrimonio de la humanidad, 26 se abstuvieron de hacerlo, 2 se ausentaron y 24 lo avasallaron, con lo cual se impuso la minoría.
Este ultraje es a la memoria del desarrollo histórico de la humanidad. Frente a tal atropello esperamos de las demás naciones que salgan del silencio y no sean indiferentes.
Nosotros no lo hemos sido, no lo somos ni nunca lo seremos.
El patrimonio de cada pueblo es el aporte al patrimonio de toda la humanidad y en la defensa de ello confiamos contar con nuestro Canciller Rodolfo Nin Novoa, a quien invitamos a recibir el Premio Jerusalem 2016.