27.04.2011
Así lo expresó el presidente del Congreso Judío Mundial, Ronald Lauder, en diálogo con la Agencia Judía de Noticias. También se refirió al peligro existente en el apoyo del ex gobierno brasilero de Lula Da Silva a Irán y al crecimiento de Hezbollah. El secretario general del CJM, Dan Diker, también se había referido al tema: “Latinoamérica tiene que entender que está confrontando una amenaza iraní en su patio trasero”.
El presidente del Congreso Judío Mundial, Ronald Lauder, aseguró que el número de terroristas y revolucionarios iraníes en Latinoamérica ha aumentado “dramáticamente”, en diálogo con la Agencia Judía de Noticias. “Fueron instruidos a quedarse quietos y callados hasta que llegue el momento de actuar”, dijo.
También expresó el peligro existente en el apoyo del ex gobierno brasilero de Lula Da Silva a Irán y el crecimiento de Hezbollah. “El mundo occidental ve a esta organización como un grupo terrorista, y sus miembros viven en la región en paz”, dijo. Además agregó que “el daño hecho es incalculable”. “Si bien entiendo que la presidenta brasileña Dilma Rousseff se ha movido del punto de vista pro iraní, llegará un día en el que el país pague un precio por el número de gente que dejó entrar a su país”, aseguró.
A partir de esto dijo que la manera de combatir el terrorismo “es hacer un balance”. “Deben abrirse económicamente a Estados Unidos y Europa. Esta es su mayor arma contra el extremismo”, agregó.
También se refirió al panorama de Medio Oriente y las expectativas israelíes con la caída del gobierno de Hosni Mubarak en Egipto, quien honró los acuerdos de paz con el Estado Judío. “Para Israel es muy peligroso lo que está ocurriendo. Si los Hermanos Musulmanes entran al gobierno, ya no habrá tratados, Jordania tendrá una gran presión para cortar lazos con Israel, y la apertura de la frontera de Gaza con Egipto llevará a que se lancen muchos más misiles a la frontera israelí”, aseguró.
También con respecto a Irán, el secretario general del CJM, Dan Diker, en diálogo con AJN, había expresado que “la conducta de la República Islámica es similar a la que tuvieron los nazis contra los judíos” durante la Segunda Guerra Mundial.
En relación con esto había dicho que la influencia iraní en la región probablemente haya empezado con los atentados a la Embajada de Israel en 1992 y a la AMIA en 1994 en Argentina. “Latinoamérica tiene que entender que está confrontando una amenaza iraní en su patio trasero. Y está tardando mucho que la gente lo comprenda, todavía no está en su pensamiento, no se da cuenta.”, destacó.
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