Hace unos días acudió en mi ayuda una cita de Marc Bloch. Cuando quise confirmarla, la “Apología de la Historia u oficio de historiador”, displicentemente traducida al castellano como “Introducción a la Historia”, apareció al alcance de mi vista, sin esfuerzo. Lo consideré una suerte de milagro e incitación a escribir sobre el viejo maestro.
