Por Joaquín Taranto, especial para CCIU
En ocasión de los 75 años del Estado de Israel, Joaquín Taranto entrevistó a Liby Noachas, una joven que toda su vida estuvo en un ambiente judío: Escuela Judía, Movimiento Juvenil (Tnuá) Betar. En estos momentos, está a pocos meses de hacer aliá, lo que sería cumplir el gran sueño de su vida. Liby nos cuenta las expectativas para su nueva vida y el mensaje que deja para quienes quieran seguir el mismo camino.
¿Qué es lo que tuviste en cuenta para tomar la decisión de hacer Aliá?
Desde pequeña me crie en un ambiente muy “Zabra” como solemos decir, mi madre nacida de padres marroquíes que emigraron a Israel en el 1952 y ella nacida y criada en Israel. En cuanto a mi padre, el hizo Aliá a los 18 años, allí estudio ingeniería en el Technion de Haifa, donde conoció a mi madre, que también estaba estudiando en Haifa. A los pocos años se casaron, tuvieron a su primer hijo, mi hermano, en Israel y a los meses decidieron venir a Uruguay por solo dos años, dos años que hoy en día se transformaron en 25 años, y acá nací yo, en Montevideo, Uruguay.
Me crié como una niña nacida en Uruguay pero que se identificaba más con Israel, siempre teniendo la ilusión de vivir en Israel, de “volver” allí, por más de no ser de allí.
Mi familia paterna la cual vive en Uruguay siempre fue una familia muy tradicionalista y sionista, y mi familia de Israel ni que hablar, así que siempre fui educada es nuestro querido Eretz Israel.
A su vez toda mi vida fui a Escuela Judía o como a mí me gusta decirle más Escuela Judía Sionista ya que vivimos en la comunidad más sionista del mundo. También desde pequeña fui a la Tnuat Noar de Betar, una tnuá a la que le debo mi Aliá ya que ni más ni menos esta es la Hakshama de Betar, hacer Aliá. Una tnuá la cual estuvo presente desde los principios del sionismo y hasta hoy en día que me está haciendo a mí cumplir un sueño haciendo Aliá.
¿Cómo fue la preparación, y que sentís que te influyó para arrancar el proceso?
Como faltan unos pocos meses todavía no empecé con la preparación emocional, despedidas con la gente o la preparación material, armando las valijas, pero si estoy todo el tiempo investigando sobre universidades y preparándome para mis estudios universitarios en Israel, ya que la entrada a los estudios terciarios no es tan fácil como lo es acá.
Prepararse para irse a vivir a Israel implica una buena planificación y organización. En primer lugar, es necesario obtener la documentación necesaria. Aprender el idioma local, en este caso el hebreo, no fue algo que se me dificulte bastante a la hora de hacer alía, ya que es el idioma que se habla en mi casa y la única manera que tengo de comunicarme con mis abuelos.
Sentí que era el momento exacto en que tenía para hacerlo, abrir las alas y volar bien alto hacia Israel y al fin empezar a cumplir sueños ¿y qué mejor que empezar por el sueño más grande?
¿Qué expectativas tenes para esta nueva etapa en tu vida?
Cada nueva etapa en la vida puede llevar consigo un conjunto de expectativas y emociones únicas. Yo, sinceramente tengo varias ya que probablemente sea el cambio más grande en mi vida hasta ahora.
Esta nueva etapa me va a presentar nuevos desafíos y oportunidades de aprendizaje, nuevas oportunidades para explorar, aprender y crecer y principalmente desafíos y obstáculos, pero también puede proporcionar la oportunidad de superarlos.
En resumen, las expectativas para esta gran nueva etapa en mi vida pueden ser diversas y variadas, pero a menudo implican la oportunidad de crecer, aprender, explorar y experimentar nuevas cosas.
¿Qué mensaje le dejas a la gente que esté pensando en hacer Aliá?
Si estás pensando en hacer Aliá, mi mensaje para tí es que te animes a tomar esa decisión y te prepares bien para tu nueva vida en Israel. Hacer Aliá puede ser una experiencia emocionante y gratificante, vas a poder conectar con la cultura, la historia y la sociedad de Israel de una manera más profunda y distinta a la manera que tenemos acá de conectarnos con Israel.
Es importante recordar que cualquier transición importante en la vida puede tener desafíos y obstáculos. Pero con una actitud positiva y un enfoque realista, vas a poder enfrentar y superar estos desafíos y disfrutar de una nueva vida en Israel.
En resumen, si sientes una conexión con Israel y estás pensando en hacer Aliá, mi consejo es que te animes a dar ese paso, te prepares adecuadamente y abraces esta nueva aventura en tu vida, que sin duda es la mejor decisión que vayas a tomar.
