El buen resultado electoral del partido de extrema derecha Svoboda inquieta a la comunidad judía de Ucrania y a Israel.
Hay al menos 103.000 judíos ucranianos en el país y 500.000 ucranianos viven en Israel. Las relaciones entre los dos países son muy estrechas.
Este rabino de Kiev expresa las inquietudes de su comunidad: “Desgraciadamente he leído los textos y declaraciones de Svoboda varias veces en los últimos años. No necesito más pruebas de que son antisemitas”, afirma Pynchas Vyshedski.
Representantes del país hebreo también muestran sus preocupaciones sobre el ascenso de este partido: “No entendemos cómo les dan la oportunidad de concurrir a las elecciones, entendemos que hay democracia en Ucrania, pero estos partidos deberían estar fuera del Parlamento”, asegura Alex Miller, miembro del Likud.
Los analistas locales describen el partido como un movimiento complejo en el que tienen cabida elementos antisemitas. Svoboda por su parte rechaza las acusaciones de antisemitismo.
“Me gustaría dirigirme a los altos representantes del Estado de Israel: respetamos vuestros sentimientos patrióticos y el sentimiento de vuestros ciudadanos. Por favor, respetad a cambio los sentimientos de los ucranianos y el derecho de los ucranianos a expresarse libremente”, ha dicho a Euronews su líder, Oleh Tahnybok.
Svoboda ha sido aceptado como aliado en la coalición democrática de la oposición de Yulia Timoshenko. Tiene por tanto la llave para que la oposición sea efectiva en la legislatura que comienza.
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