Israelíes y palestinos relanzan el diálogo

Israelíes y palestinos relanzan el diálogo
Medio Oriente. Obama impulsa nueva etapa de negociación directa; hay poco optimismo
JERUSALÉN | AFP
El presidente norteamericano Barack Obama recibirá mañana a su par de Israel y al presidente de la Autoridad Palestina en preparación de la reanudación del diálogo directo de paz entre ambos, después de 20 meses.
La secretaria de Estado norteamericana Hillary Clinton invitó al primer ministro israelí Benjamin Netanyahu y al presidente de la Autoridad Palestina Mahmud Abbas a reanudar el diálogo directo, algo que sucederá el jueves en Washington.
Mañana Obama recibirá en una cena en la Casa Blanca a Netanyahu, Abbas, al rey Abdalá II de Jordania y al presidente egipcio, Hosni Mubarak, entre otros. También están previstos encuentros bilaterales.
Netanyahu dijo ser “consciente de las dificultades” de la negociación y que no las minimiza y adelantó que tiene “la intención de sorprender a los escépticos”. “La cuestión fundamental es saber si la parte palestina está dispuesta a avanzar hacia una paz que resuelva el conflicto durante varias generaciones”, añadió.
El hebreo considera que las condiciones para un acuerdo son el “reconocimiento de Israel por parte de los palestinos como Estado del pueblo judío y que el acuerdo estipule el final del conflicto”, además de garantías de que la retirada de Cisjordania no sea seguida de ataques desde zonas evacuadas.
Por su parte Abbas subrayó el “sentido de la responsabilidad” que anima a los negociadores palestinos: “Si hubiera, aunque sólo fuera un 1% de oportunidades de llegar a la paz, nos esforzaríamos en lograrlo”, comentó.
Pero también dijo que Israel “asumirá la entera responsabilidad” del “fracaso” de las negociaciones directas de paz “si las actividades de colonización continúan en los territorios palestinos ocupados en 1967”.
Bajo la intensa presión estadounidense, la Autoridad Palestina renunció a su exigencia de pedir garantías, en particular sobre la colonización, pero advirtió que el fin de la moratoria sobre este tema supondría el fin de las conversaciones.
Netanyahu estaría considerando prolongar la moratoria parcial de construcciones en Cisjordania que finaliza el 26 de septiembre en los asentamientos aislados, pero no en los grandes bloques que Israel prevé anexionar. De todas maneras, un responsable hebreo indicó que su gobierno no había tomado “ninguna nueva decisión sobre esa cuestión”.
Además del abismo entre las posturas, las dos partes encaran las negociaciones con concepciones radicalmente diferentes.
La Autoridad Palestina se basa en el principio de un intercambio de “tierra a cambio de paz” previsto en las resoluciones de la ONU y en planes de paz como la iniciativa árabe y la Hoja de Ruta del Cuarteto (firmados por ONU, EE.UU., Rusia y la Unión Europea).
Netanyahu quiere, por el contrario tomar un punto de partida nuevo y busca implicarse personalmente en las negociaciones con Abbas. No será apoyado por ningún ministro sino por consejeros -algo poco habitual- y el equipo de negociadores no tendrá poder de decisión.
La Autoridad Palestina todavía no ha respondido a la oferta de Netanyahu de mantener encuentros personales “dos veces por mes” con Abbas una vez se hayan reanudado oficialmente las negociaciones.
Otro obstáculo es que los islamistas del Hamas (acrónimo en árabe del Movimiento de Resistencia Islámica), en el poder en Gaza, han rechazado las negociaciones, que denuncian co-mo “un nuevo engaño”.
El ministro de Relaciones Exteriores israelí, Avigdor Lieberman, cree, por su parte, que estas conversaciones no son más que un “evento festivo”.
El rol de EE.UU.
La Casa Blanca tiene en su lista de prioridades la conquista de la paz en Medio Oriente y los analistas aseguran que debe tener una actitud “muy activa” para obtener éxito. Los expertos afirman que el relanzamiento está precedido por varios fracasos debidos a la lentitud o resistencia de EE.UU. en la intervención cuando las negociaciones se estancaron.
Grandes temas en discusión
CREACIÓN DE UN ESTADO PALESTINO Y SUS PODERES:
Los palestinos quieren proclamar un Estado soberano en los territorios palestinos ocupados por Israel en 1967 (Jerusalén Este, Cisjordania y franja de Gaza). Israel reclama la desmilitarización de este Estado, el control de su espacio aéreo y de sus fronteras exteriores.
TRAZADO DE FRONTERAS PALESTINAS y COLONIAS:
Los palestinos exigen una retirada israelí de todos los territorios ocupados desde 1967, pero aceptan modificaciones menores. Israel excluye volver a las fronteras anteriores a 1967, pero está dispuesto a retiradas en Cisjordania. Quiere anexar los asentamientos de colonos. Los palestinos exigen la congelación de la colonización.
ESTATUTO DE JERUSALÉN:
Israel considera a Jerusalén como su capital “indivisible y eterna”. La Autoridad Palestina quiere hacer de Jerusalén Este su capital.
DESTINO DE REFUGIADOS:
Los palestinos exigen que Israel reconozca un derecho al retorno de los cuatro millones de refugiados. Israel rechaza categóricamente la aplicación de este “derecho al retorno”.
CONTROL DEL AGUA:
Israel se reserva gran parte de las napas freáticas en el subsuelo de Cisjordania. Los palestinos reclaman una distribución equitativa.