Teherán amplía el círculo de países sudamericanos amigos
Autor: Isac Gliksberg*
Recientemente visitó Teherán, el presidente de la República de Bolivia.El hecho, no tuvo en la prensa y la televisión la difusión y el destaque que podría merecer. Tal vez, porque ya está siendo algo común que el régimen de Irán se relacione, y suscriba acuerdos, con Gobiernos sudamericanos.
La primera visita de Evo Morales a Irán había acontecido en el mes de septiembre de 2008 y en ésta, la segunda visita del presidente boliviano, el primer mandatario sudamericano llegó a la capital iraní con el propósito, en esta ocasión, de profundizar las relaciones políticas, ampliar la cooperación económica, industrial y comercial, entre otros propósitos incluso, de carácter militar.
Irán acaba de suscribir con Bolivia un Memorando de Acuerdo y manifestó su interés de transferir conocimientos tecnológicos en materia de industrialización del litio y en producción de energía atómica.
La presencia iraní en Ecuador y Venezuela
En el primer viaje de Morales a Teherán, visitó diversos proyectos industriales de maquinaria industrial y de aeronáutica civil y militar.
Irán y Bolivia establecieron relaciones diplomáticas el 8 de septiembre de 2007, cuando el presidente de Irán realizó un viaje oficial a la capital boliviana, La Paz, para firmar acuerdos comerciales y de energía con un plazo de vigencia de cinco años por un monto de 1.100 millones de dólares norteamericanos.
Pocas semanas atrás, el 8 de octubre, visitó Bolivia el ministro de Industrias y Minería de Irán, Ali Akbar Mehrabian, para firmar con el Gobierno del país sudamericano acuerdos comerciales y de energía.
El pasado 19 de octubre llegó también a Teherán, en su octava visita a la nación iraní, el presidente de Venezuela Hugo Chávez, quien manifestó que lo hacía para “tratar temas de carácter estratégico y muy valiosos”. De hecho, está funcionando una línea aérea semanal que une Caracas, la capital venezolana, con Teherán, la capital iraní.
El 6 de diciembre de 2008 el Gobierno de Rafael Correa suscribió 13 convenios incluyendo de carácter militar, energía, industria, banca, inversiones, turismo, tecnología, electricidad y recursos hídricos.
El 8 de enero del corriente año, presentó sus Cartas Credenciales ante el canciller ecuatoriano, el primer embajador de Irán en Ecuador, lo cual consolida las relaciones de carácter político y diplomático entre la nación de Oriente Medio y la sudamericana.
Acuerdo con Turquía y Brasil
El pasado 17 de mayo, se suscribió en Teherán un acuerdo entre Irán, Turquía y Brasil, ésta última, la mayor y más poderosa nación del continente sudamericano, por el cual Irán entregará a su vecina Turquía 1.200 kilos de uranio enriquecido a 3,5% que permanecerá bajo vigilancia iraní y turca y recibirá, en un año, 120 kilos de uranio enriquecido al 20%, procedente de Francia y Rusia, para uso de su reactor nuclear.
Fue un hecho sumamente difundido y comentado por los medios informativos de todo el mundo e, incluso, generó comentarios por parte del secretario general de las Naciones Unidas, Ban Ki-moon.
El 24 de mayo de 2010, el vicepesidente de Irán se reunió en la ciudad balnearia uruguaya de Punta del Este, con el titular de Relaciones Exteriores de Uruguay, Luis Almagro, con motivo de la IV Asamblea del Fondo Mundial para el Medio Ambiente.
El otro hecho ocurrido en el correr de la última semana de octubre fue el anuncio periodístico de que Irán comenzó a cargar combustible en el reactor de la central nuclear de Bushehr, al sur del país. Afirmó también que la fecha y el orden del día de las negociaciones por el tema nuclear con las grandes potencias, quedará por definirse. Aunque se trata de la fase inicial de carga de la central nuclear, no deja de ser este hecho preocupante por los riesgos de proliferación nuclear en Oriente Medio.
A los hitos mencionados líneas arriba, se suman las intensas gestiones diplomáticas y visitas oficiales en busca de solidaridad que realizan los dirigentes de Irán, con importantes naciones del Medio Oriente, como ser Turquía, el Líbano y Siria.
Ya que mencionamos a Siria, señalemos que también este país ha buscado fervientemente en los últimos tiempos acercarse a América del Sur. Así fue como, a fines de junio pasado, el presidente Bashar Al-Asad realizó una gira por América del Sur, la primera que realizó un jefe de Estado sirio, para estrechar vínculos políticos y económicos, según manifestó, con Cuba, Venezuela, Brasil y Argentina.
Cabe preguntarse: ¿a qué obedecen todos estos movimientos, principalmente de parte del Gobierno iraní?
Como seguramente sabrá el lector, Foucault fue un físico francés que en la mitad del siglo XIX construyó un péndulo esférico, sistema físico, que puede oscilar bajo la acción de una fuerza, libremente, en cualquier plano vertical durante muchas horas.
Los movimientos político-diplomáticos que viene realizando, sobre todo, el Gobierno de Mahmud Ahmadineyad, se parecen, sin duda, a los movimientos propios de un péndulo de Foucault.
Irán evidentemente busca, con estos movimientos, romper el aislamiento al que se encuentra sometido, tanto por su política con relación al tema energético nuclear, como por algunos hechos inhumanos de su Gobierno, tales como la condena por lapidación y una nueva condena a 99 latigazos a la joven Sakineh Mohammadi Ashtiani, a raíz de una fotografía falsamente atribuida a ella y que fuera publicada por un diario británico, por un supuesto caso de adulterio.
Al mismo tiempo, la nación persa procura, afanosamente y con todo tipo de artilugios, nuevos aliados para bloquear o evitar nuevas sanciones internacionales y la oposición de la opinión pública internacional contra su país y la línea política que utiliza.
En este último sentido, el pasado 8 de octubre, en la ciudad de Paraty, al sudeste de Brasilia, la capital de Brasil, tuvo lugar la realización de una Feria Literaria. Múltiples escritores participantes de la misma, criticaron duramente al Gobierno de Teherán por su política en materia de Derechos Humanos, por su calificación como un “mito” del Holocausto judío en la Segunda Guerra Mundial, al tiempo que criticaron también duramente al Gobierno de Brasil por su acercamiento al régimen islámico fundamentalista de Irán.
Y los busca tanto en la región del Medio Oriente (el Líbano, Siria, Turquía), como en Occidente.
Por ejemplo, el pasado 10 de octubre, Ahmadineyad declaró públicamente que “su país está preparado para unir esfuerzos con el Vaticano y lograr “una estrecha cooperación” con las grandes naciones del Este, Rusia y China, por ejemplo, y del Sur del planeta, los países ya mencionados del continente sudamericano. Es decir, movimientos de fuerza que van de Occidente a Oriente y de Norte a Sur.
Como para que el lector recuerde los movimientos ondulatorios libres del péndulo de Foucault y como para tener muy en cuenta y prestarle mucha atención a lo que está sucediendo.
*Miembro titular de la Academia Uruguaya de Geopolítica y Estrategia.
Irán y el péndulo de Foucault
17/Nov/2010
Aurora, Isac Gliksberg
