El racismo en la tribuna

16/Abr/2012

El País, Uruguay, Que Pasa

El racismo en la tribuna

14-4-2012
Una comisión “semipintada” intenta atender los casos
Una vez cada tanto, aflora. El racismo, o el rechazo a judíos y homosexuales son parte del contexto cultural uruguayo desde hace mucho. La última vez, de hecho esta semana, fue en la semifinal del campeonato de básquetbol, cuando a un grupo de seguidores del club Aguada -poco numeroso, según varios testimonios- “le salió el nazi” (como escribió alguien en Twitter) y lanzó cánticos antisemitas. El adversario era Hebraica Macabi, equipo surgido de la colectividad judía uruguaya. La Federación Uruguay de Básquetbol comunicó que se multará a Aguada y el propio club emitió una declaración de repudio contra los cánticos.
Hay una comisión honoraria que, dentro de la órbita del Ministerio de Educación y Cultura (MEC), trabaja para combatir las expresiones que incitan al odio hacia afrodescendientes, judíos u homosexuales, tres colectividades que siempre están en la mira de discriminadores. Pero como dice Marcos Israel, uno de sus integrantes, esta comisión está “semi-pintada”. Siendo honoraria -y sin contar siquiera con una secretaria porque el MEC le “presta” una cuando puede y quiere- la comisión dirigida por el abogado Javier Miranda hasta ahora no ha podido exhibir resultados positivos concretos.
“Es cierto que la comisión no ha realizado alguna denuncia penal, aunque si la Justicia quisiera podría actuar de oficio”, dice Israel. “Pero para nosotros ese, el de la denuncia penal, no es el camino a seguir. Al menos hasta no agotar otros, que llevan su tiempo y para los cuales el éxito se mediría con otros parámetros”, según Israel.
Romero Rodríguez -quien también integra la comisión y es embajador itinerante para temas de discriminación- recuerda el caso de la tirada de bananas a la cancha de fútbol en el partido Central Español-Progreso (el golero de Progreso es afrodescendiente) en febrero.
Dado que en ese caso no hubo sanciones, la pregunta es si el fútbol “tiene coronita” o si es que se tolera más una ofensa contra los afrodescendientes que contra los judíos.
“No. Pero a raíz de ese caso se comenzó un trabajo de sensibilización que está dando resultado”, dice Rodríguez. “Se salió varias veces a la cancha con carteles contra el racismo, se está trabajando con los referentes de las hinchadas y con las direcciones de los clubes. Todo bien con la multa o la sanción, pero no como lo primero”.
Israel, por su lado, añade que es probable que el insulto contra los afrodescendientes sea más frecuente que el antisemita. “Pero no mucho. Lo importante es seguir trabajando para cultivar y sensibilizar”. Respecto a la comisión, Israel espera que haya cumplido su ciclo cuando empiece a funcionar el anunciado Instituto de Derechos Humanos. “Hay mucho para hacer, y es un avance que se destinen recursos presupuestales para que se encarguen de esto”.
Uno de los desafíos a encarar, para Israel, es dar la discusión de cuándo no se podría alegar “libertad de expresión” en las redes sociales, cada vez más importantes como vehículos de opinión y debate en la sociedad uruguaya. (F.M.)