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Antes de la celebración anual del 27 de enero como Día Internacional de Conmemoración del Holocausto, el presidente Isaac Herzog habló ante el Parlamento Europeo en Bruselas el jueves. Para el acto conmemorativo especial, que celebra anualmente el Parlamento, el presidente israelí fue invitado como orador principal.
Varios supervivientes del Holocausto, así como líderes de la comunidad judía local, asistieron a la ceremonia, que recibió una gran cobertura mediática.
Roberta Mestola, presidenta del Parlamento Europeo, saludó a Herzog a su llegada al recinto. Dirigiéndose a las cámaras, Metsola declaró que el Día de la Memoria del Holocausto y la lucha contra el antisemitismo son de suma importancia para el Parlamento Europeo. En Europa, los judíos de todas las tendencias y las comunidades judías deben sentirse seguros. Condenamos el antisemitismo y lo combatimos utilizando todas las herramientas disponibles. Hacemos especial hincapié en la educación de las nuevas generaciones y en la lucha contra la incitación al odio y la desinformación. Cuando visité la Knesset en primavera, comenté: “Ser antisemita es ser antieuropeo”.
El Holocausto, que ha afectado y seguirá marcando a la humanidad durante décadas, fue calificado de “la peor atrocidad de la historia” por Metsola en su discurso de apertura del hemiciclo. La conexión entre los pueblos de Europa e Israel, según Metsola, se estableció a través de las dificultades, pero también comparten un futuro común, así como la historia y la obligación de recordar. Metsola instó a fomentar y profundizar estas relaciones sencillas y abiertas.
Herzog comenzó su discurso, pronunciado ante los miembros del Parlamento Europeo, relatando la historia de su abuelo, el rabino Dr. Yitzhak Isaac HaLevi Herzog, Gran Rabino de la Tierra de Israel, que viajó a Europa en 1946 en un esfuerzo por rescatar y realojar a los judíos del devastado continente. Las líneas de “El Malei Rachamim” fueron reescritas por el rabino al llegar a Varsovia en honor de todos los judíos que perecieron. A continuación, el pago de Kadis fue citado por el presidente Herzog en honor de las víctimas del Holocausto.
“La fea bandera del antisemitismo es enarbolada hoy con orgullo por fuerzas al margen de la política europea y mundial, lo que supone una vez más una amenaza de transformar naciones democráticas y civilizadas en otras que se comen a su propio pueblo. Por desgracia, es una imagen terrible. Profundamente inquietante”, declaró Herzog. El presidente israelí afirmó que sigue habiendo odio a los judíos. El antisemitismo sigue siendo un problema. La negación del Holocausto persiste hoy en día. Los informes más recientes indican que los niveles de antisemitismo son más altos que nunca. Esta vez, también está activo en plataformas virtuales, donde se nutre de ellas, echa raíces, prospera y esparce veneno. Con sólo pulsar un botón, el antisemitismo viral se extiende por Internet a un ritmo sin precedentes. Prácticamente no hay separación entre un vídeo viral y una agresión violenta.
Herzog se dirigió inmediatamente a los políticos europeos, instándoles a actuar. Debéis reconocer los síntomas de la pandemia antisemita, leer las señales de advertencia y combatirla a toda costa. Debéis aseguraros de que todo judío que quiera vivir una vida plenamente judía en vuestras naciones pueda hacerlo sin miedo”, dijo Herzog.
“Debemos luchar juntos como una sola comunidad, decidida y cohesionada, contra las fuerzas de la oscuridad y el odio que amenazan con destruirnos”, declaró Herzog en una advertencia contra la dictadura de Teherán. “Como dirigente del Estado de Israel, hablo principalmente del régimen iraní, que no sólo pide abiertamente la aniquilación de mi nación, sino que ejecuta a sus propios ciudadanos por exigir libertad y derechos humanos y civiles, incita a guerras civiles en todo Oriente Próximo, participa directa y mortalmente en el conflicto de Ucrania y está trabajando para desarrollar armas nucleares que suponen una grave amenaza para la estabilidad mundial”.
Tras el discurso de Herzog, se guardó un minuto de silencio en honor de las víctimas del Holocausto, tras lo cual el clarinetista israelí Chen Levy y el cimbalomista húngaro Jeno Lisztes interpretaron una pieza musical titulada Kadish.
Tras el acto, Herzog y Metsola descubrieron un duplicado del cuadro El refugiado, de Felix Nusbaum, inspirado en el asesinato de Auschwitz-Birkenau en 1944. La réplica se colocó en el hemiciclo de entrada al Parlamento Europeo para que cada vez que un legislador entrara en el pleno la viera y se acordara de ella.
La visita de dos días de Herzog a la capital belga alcanzó su punto álgido durante el acto celebrado en el Parlamento Europeo. Herzog mantuvo inicialmente una reunión en el palacio real con el Rey belga Philippe tras llegar a Bruselas el miércoles por la mañana. A continuación acudió a una reunión con Ursula Von der Leyen, Jefa de la Comisión Europea. La lucha contra el antisemitismo en todas sus formas en toda Europa fue uno de los temas que Von der Leyen y yo tratamos.
Herzog felicitó a Von der Leyen por su liderazgo en la lucha contra el antisemitismo y declaró que, lamentablemente, estaba resurgiendo tanto en Europa como en el resto del mundo. Sabe muy bien que siempre se empieza por el antisemitismo y nunca se acaba con él. Y dado que mañana es el Día Internacional de la Memoria del Holocausto, creo que es justo que esté hoy con todos ustedes para reafirmar nuestro compromiso inquebrantable de luchar contra el antisemitismo y el odio en todas partes”.
Herzog instó a los líderes europeos a adoptar una postura firme contra la dictadura de Teherán, señalando que no sólo amenaza a Israel, sino también a la región de Oriente Próximo, a Europa y a todo el planeta. Los dos líderes hablaron también de Irán durante su conversación.
La petición de Herzog se produjo a raíz de una resolución que la Eurocámara aprobó la semana pasada con una rotunda mayoría, en la que se instaba a los dirigentes de la UE a incluir a la Guardia Revolucionaria Iraní (CGRI) en una lista negra y a endurecer las sanciones contra las personas relacionadas con Irán que hayan violado los derechos humanos y reprimido protestas.
Los ministros europeos de Asuntos Exteriores se reunieron el pasado lunes en Bruselas, donde rechazaron la petición de incluir al CGRI en la lista de grupos terroristas del continente y sancionar a 37 personas y organizaciones.
