Acabo de leer un libro escrito por “varios sabios” musulmanes, los muytahidín, cuyo texto fue “revisado y aprobado” por el Imam Al-Jomeini. (*) En el prólogo se dice que, según el Islam, todo lo que el hombre hace puede dividirse en cinco categorías: lo obligatorio, lo ilícito o prohibido, lo preferible o meritorio, lo desaconsejable o detestable y lo permisible. Describir cada una de estas acciones llevaría mucho espacio y fatigaría al lector. Solamente transcribiré lo que se considera desaconsejable o detestable ( makrúh), para resaltar el juicioso criterio de estos consejeros: “Orar teniendo por delante una imagen, comer mucho, soplar la comida, comer comida muy caliente, etc.”.
