El mundo parece casi haberse acostumbrado a oir barbaridades y tergiversaciones históricas de boca del Presidente de Irán Mahmud Ahmadinejad, que ha convertido en parte de su discurso público el desmentido del Holocausto, aunque fue una de las maldades humanas más documentadas de la historia. Hay sin duda quienes dicen “está loco” y con eso resuelven el problema de cómo lidiar con un dictador que habla de esa forma. También de Hitler decían que era loco.
